Anhelo volver a besarte,
volver a sentir el roce
de tu delicada piel,
anhelo verte otra vez.
Añoro los paseos nocturnos
por la orilla del mar,
añoro los besos dulces
que tras cada paso
me regalabas...
Ver como tu vestido
baila con el viento,
ver como tu suave cabello
con la brisa juega.
Añoro la emoción
de volver a darnos
el primer beso.
Escondidos,
con el miedo dentro
de que aparezca
alguna figura paterna.
Extraño el morbo
de hacerlo en un lugar
frío y oscuro
donde podemos ser
descubiertos...
Extraño que se aceleren
mi pulso, mi corazón,
el ritmo de mi respiración...
Al fin puedo tocarte,
al fin puedo sentir
tu fina piel, tan solo
han tenido que cerrarse
mis ojos, otra vez...
Mikel.
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