
Fui a buscar una luz
al mas profundo rincón
de mi oscuro corazón,
alli no estabas tú.
Creí ver un rayo,
una flecha de amor,
el frío viento
se la llevó...
Ahora no hay nada,
ni gestos ni miradas,
ni señales de humo
de todo el amor que hubo.
Todo se borró,
todo se voló,
todo lo malo
desapareció.
Mi pobre corazón
tan solo quiere
de nuevo empezar,
una nueva ilusión.
Ya no tiene candado
como lo tuvo antaño,
ahora tan solo espera
volver a ser habitado.
Y así pasa los días,
oscuro y solitario,
la brisa del viento
lo cuida mientras tanto...
Mikel.